Según el Instituto de Seguros para la Seguridad en Carreteras (IIHS), cada año se estima que 292 personas mueren y 18,000 resultan heridas cuando los conductores retroceden y las golpean. Estos tipos de accidentes suelen ocurrir en entradas de vehículos o estacionamientos, y los niños pequeños y las personas mayores son los más propensos a morir en tales choques. El riesgo de retroceder sobre alguien aumenta debido a las grandes zonas ciegas de muchos vehículos, que no permiten a los conductores ver objetos detrás del parachoques, en particular, aquellos objetos que están cerca del suelo. Las camionetas y los SUV, que tienen las zonas ciegas más grandes, suelen estar involucrados en más choques de retroceso que los automóviles. Según un estudio realizado por el IIHS, las cámaras traseras parecen ser la tecnología más prometedora disponible para evitar tales choques.
El estudio del IIHS, realizado con conductores voluntarios en un estacionamiento vacío, midió las zonas ciegas de varios vehículos en relación con niños de diferentes tamaños representados por marcas en un poste móvil. En su mayoría, se descubrió que los autos pequeños tenían la mejor visibilidad mientras que los grandes SUV tenían la peor. En general, sin la tecnología adicional, cuanto más grande es el vehículo, peor es su visibilidad. Sin embargo, con las cámaras traseras, las zonas ciegas de los vehículos se redujeron en un promedio del 90%.
Cómo los conductores usan la tecnología En un análisis relacionado sobre la efectividad de las cámaras traseras, a los conductores no se les dijo el verdadero propósito del estudio. Se les dijo a los conductores que debían evaluar el sistema de entretenimiento e información de un vehículo, luego de ajustar la radio y leer desde una pantalla de navegación, se les indicó que retrocedieran el vehículo de su lugar de estacionamiento y condujeran hasta su propio vehículo. Mientras retrocedían, se colocó un recorte de espuma de un maniquí de prueba del tamaño de un niño en el camino de retroceso del vehículo.
Los conductores con la cámara trasera tuvieron menos colisiones con el objeto estacionario, pero no previno todas las colisiones, incluso cuando se usó correctamente. El estudio encontró que las condiciones climáticas y de iluminación, como la sombra, podrían afectar la utilidad de las cámaras.
Sin embargo, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras ha indicado que las cámaras traseras son la única tecnología disponible que cumple con un mandato del Congreso para expandir el campo de visión requerido detrás de un vehículo, y agregará las cámaras a la lista de características recomendadas en sus calificaciones de seguridad de vehículos.